domingo, 26 de abril de 2009

Las noticias en tiempos de influenza


Debido a la inédita alarma sanitariade influenza porcina en la capital, zona metropolitana y algunos estados de México es necesario contar con información oportuna que coadyuve a tener un panorama integral de lo que sucede y que trascienda de los mitos y de la paranoia colectiva que se genera ante una situación de riesgo como la que ahora ha puesto en jaque no sólo a nuestras autoridades, sino también a organismos de salud internacionales.



Este espacio se une al esfuerzo de personas que desean informar y no sólo hacer eco de los acontecimientos, a través de un monitoreo de las noticias publicdadas en el periódico EL UNIVERSAL referentes a este padecimiento porcino

En la siguiente página podrás encontar todo el seguimiento de noticas al respecto...

http://mx.geocities.com/karinasua/kelvar.html Haz click e infórmate

domingo, 12 de abril de 2009

Sábado “de gloria” en medio de la sequía


Por Karina Suárez


  • En un recorrido por las colonias Tlacotal, Agrícola Pantitlán y Agrícola Oriental, la mayoría de las calles están desiertas.

  • La multa por tirar agua este día es de 20 a 30 salarios mínimos y un arresto de hasta 36 horas.

“Ahí va el agua, ahí va el agua”, Tonatzin, de ocho años, sale corriendo para que el cubetazo con agua no le llegue, se esconde del líquido aunque está empapada. En la otra banqueta, cuatro niños, de entre seis y 12 años, se esconden tras los coches para que no los mojen.

Con chanclas, un short y una camiseta blanca esta niña ha salido a festejar el Sábado de Gloria con los vecinos y como castigo se avientan cubetas repletas de agua sobre la cabeza. En menos de media hora estos siete niños tienen agua hasta en las orejas.

Ellos son los únicos que se atrevieron a mojar en la calle este sábado, con el intenso calor de mediodía este juego sabe a gloria.

La señora María Luisa, abuelita de Tonatzin, les grita que dejen de mojarse, que la policía se los va a llevar. Pero los niños están muy ocupados tratando de mojarse unos a otros. La señora resignada asegura “que esto es lo bonito del Sábado de Gloria, es continuar con una tradición”.

No todos pueden mojarse en la calle como Tonatzin. Los vecinos de la colonia contigua, Ampliación Ramos Millán, afirman que desde hace 15 años que la gente ha dejado de echarse agua en las calles.

“No es posible continuar con esta costumbre con el chorrito de agua que cae”, afirma la señora Guadalupe Caballero tras padecer desde hace un mes el desabasto de agua en la unidad habitacional Mujeres Ilustres de 410 departamentos, ubicados en la colonia Iztacalco.

El señor Alfredo Zambia se lamenta de que a sus hijas Angélica y Areli “ya no les toco”, al preguntarles a las niñas porque no acostumbran mojarse en este Sábado de Gloria aclaran que es porque ya no hay agua.

En un recorrido por las colonias Tlacotal, Agrícola Pantitlán y Agrícola Oriental, la mayoría de las calles están desiertas. Sólo se ven en las gasolineras y en los talleres de bicicletas a personas inflando pequeñas albercas porque prefieren celebrar en el interior de su hogar.

Al respecto, Ricardo Espinosa quien vive en la colonia Tlacotal comenta que la tradición de recibir la gloria con un baño ya no es asunto de las nuevas generaciones, la tradición se ha perdido por la escasez de agua y por las multas que ahora imponen si descubren que desperdicia el agua.

Sin embargo, todavía hay algunos valientes, o por lo menos eso revelan los más de 10 reportes, que el policía de la sección 25 de Pantitlán, Luis Guzmán, ha recibido donde se denuncia a las personas que desperdician el líquido en la calle.

La multa por tirar agua es de 20 a 30 salarios mínimos y un arresto de hasta 36 horas. “Lo malo es que no podemos detenerlos porque al ver la patrulla se meten rápido a sus casas y ya no se puede hacer nada” asegura este representante de la autoridad.

Mientras unos la tiran, otros se conforman con lo que cada quince días les trae la pipa. Esta es la situación de los dos hijos de la familia León Galindo. Para ellos este Sábado de Gloria es tan común como los demás: sin agua.

Ellos y 50 familias más aguardan a que su pequeña cisterna se termine de llenar. Su padre, Raúl León Galindo, pensaban que la escasez del líquido terminaría tras el segundo corte, pero ahora comprueban que la sequía no tiene para cuándo acabar.

A pesar de vivir en la misma delegación Tonatzin y su familia no han sufrido este problema porque su casa cuenta con cisterna propia, pueden realizar sus actividades sin problema, por ello festejan este día entre cubetas y charcos de agua.